Ciber-riesgos en empresas: ¿Qué proteger y cómo hacerlo?

En el mundo actual, es fundamental que las empresas se encuentren protegidas ante los diferentes ciber-riesgos que pueden aparecer y atacarla. ¿Cómo pueden estar protegidas?

¿Cuáles son los ciber-riesgos más importantes que ha de esquivar su empresa?

Entre esos riesgos de manera reciente, se han colado, según un juicio prácticamente unánime de los gerentes, los riesgos digitales o ciber-riesgos. Tanto en el corto como en el medio plazo. Según una reciente encuesta de FERMA (Federación Europea de Asociaciones de Gerentes de Riesgos).

Ello está provocando numerosas transformaciones en las empresas. Tanto desde el punto de vista de las estructuras organizativas y del papel desempeñado por los gerentes de riesgos como en cuanto a la adopción de políticas de protección en este sentido.

Indudablemente, la implantación de tecnologías innovadoras es algo que se está implantando. Y que, según esta misma encuesta, alcanza ya al 67% de los casos, aunque la tendencia es al alza y hacia una implantación total.

De hecho, el presidente de FERMA, Dirk Wegener, ha afirmado lo siguiente. “Los gestores de riesgos aprovechan cada vez más la tecnología innovadora para mejorar la medición, el análisis y el tratamiento de los riesgos. Esto es esencial para que podamos gestionar las lecciones aprendidas para el mundo posterior al Covid-19 para nuestras organizaciones”.

¿Qué mas se puede hacer para combatir estos ciber-riesgos?

Pero, ¿Qué más podemos hacer para colaborar en el aminoramiento de este riesgo? Y desde luego, ¿qué pueden hacer las empresas en el ámbito de los seguros a este respecto?

Obviamente, el seguro de ciber-riesgos es una herramienta que ha llegado a la empresa para quedarse . Y que, desde luego, tiene por delante un horizonte de crecimiento que va a convertirlo, en el medio plazo, en algo imprescindible.

Proteger y asegurar cuestiones y áreas como la propiedad intelectual, las fusiones y adquisiciones, el futuro de los profesionales a través de sus planes de jubilación y de pensiones que pueden ser hackeados. O las ‘propiedades cibernéticas’ de los directivos de las empresas, el material sensible a delitos informáticos y la responsabilidad corporativa. Son algunas de las áreas a proteger con especial cuidado y elementos para los que las compañías aseguradoras ya tienen productos de gran eficacia.